REMEMORANDO.

Nos rodea la brisa
de una mañana de otoño,
y envueltas en tu sonrisa
las hojas me sienten bisoño.
Se que estás conmigo
aunque no oiga tu caminar
pues mi mente está contigo
y es facil de adivinar.
Van tus pasos en tu calle
unidos a los mios
y vamos cogidos del talle
junto a los chopos sombrios.
Pasamos por el estero
cuando nos damos un beso,
vas vestida con esmero
para mi mejor embeleso.
Hace frio y en un momento
voy en busca de tu chaqueta,
la roja del departamento,
antes de que el resfrio acometa.
Ya se divisa el centro
y el busto de Bernardo,
entre la gente calle adentro
por un cafecito en deseos ardo.
Nos sentamos en el Vitamin
y pedimos lo deseado
y entre el aroma a jazmin
me he pedido un helado.
Me miras mientras degustamos
lo servido y demorado
y con amor nos besamos
como dos enamorados.
Una pulsera de cobre
compramos a un gitano,
"no conteis plata ante los pobres"
nos dijo un puritano.
Alegre y sonriente,
de la mano te tomo,
y regresamos con el aliciente
de admirar el aromo.
Ya compramos la beterraga,
la ensalada y el zapayo,
para que en la cocina se haga
en esta mañana de Mayo.