Te lo diré con hechos,
no sólo con palabras te lo diré,
te lo diría también con mis besos
y te lo digo una y otra vez.
No sólo con palabras se demuestra,
los hechos son más coherentes,
se hacen como cosa nuestra
para demostrar lo que se siente.
Las palabras son aire y nada
dicen más allá del objetivo
de comunicar con palabra alada
algo que se sabe con adjetivo.
Los besos son el estandarte
de toda demostración de amor.
Besos divinos quiero darte
de todas las formas y color.
Y repetir con toda libertad
el sentimiento noble y puro,
y demostrar con la verdad
lo que es más que un conjuro.
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