Ella es la mujer que yo quiero
la que llena mis noches de fuego
la que gime y se solaza
cuando ha disfrutado mi cuerpo.
Ella conoce todos mis senderos
por que los ha recorrido
dejando en ellos sus huellas
cuando lo acaricia con sus dedos.
Ella sabe del sabor de mis besos
por que bebe en mi boca
cuando su sed le reclama
para que mi saliva alivie su deseo.
Ella siente la pasión de mi fuego,
la siente cuando la envuelve mi lava,
cuando la erupción anega su centro,
cuando escucha la tempestad de mis jadeos.
Ella vela mi sueño cuando cansado de la batalla
entrego mi vida al descanso del guerrero
al descanso que me envuelve en silencio
cuando en la quietud de la noche pone en mi boca un beso.
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