No soy de imponer leyes,
menos aùn hacer valer mis criterios,
doy el espacio a cada cual y sin misterios
me gusta que todos se sientan como reyes.
Llevo los sueños enmarcados
sobre un lienzo sin fondo,
espacio extenso, gentil y hondo,
donde los colores estàn enamorados.
Admiro el amor, la libertad de palabra,
la expresiòn precisa y clara
que a nadie ofende y aclara
lo que con sentimiento se labra.
Busco de la vida su lado bueno,
vivir como siempre he querido
sin rasgarme el corazòn y el vestido
valorando el calor ajeno.
Por eso soy feliz y sonrìo
dando gracias a los cielos
que me colman de dicha, desvelos
y me hacen decidir a mi libre albedrìo.