Sabes que estás unida a mis paisajes,
que las ramas de mi árbol,
incansables brazos, extrañan
tu contenido para envolverte.
Sabes que eres mi barca,
salvavidas en la mar bravía,
donde tus remos fueron asidero
cuando me ahogaba en el agua fría.
Sabes que eres el cielo estrellado
que cada noche me cobija.
La luz que ilumina mi sendero
en las noches más oscuras.
Sabes que necesito de tus besos
como el aire para vivir
y del néctar que emanan
tus sentimientos por mi.
Sabes que eres alguien muy especial
que siempre llevaré en mi alma,
nunca me faltes por favor
que sin ti se morirá mi corazón...
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