Quería pensar que había llegado
hasta la orilla más cercana...
Cuando aún quedaba
infinita mar
entre las olas más bravas
mi corazón salió a navegar.
Temporales bravíos
azotaron mi barca
lanzando sobre las rocas sus notas.
Las canciones querían llorar.
Desperté, una mañana, naufragado
y comencé a caminar...
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