Disculpa, tengo una cita con el destino y voy tarde,
acompáñame si quieres por que vamos en el mismo camino...
Si cuando llegue no está, me disculparé cuando lo vuelva a encontrar
por que él sabe que yo decidí llegar tarde sin más.
No quería ver su semblante, ni su sonrisa además,
deseaba hacerme el indiferente y de sus sermones pasar.
No quiero saber de él, no me importa decirlo, por que quiero
vivir la vida sin pensar que mañana será diferente
y si nada acompaña a mi felicidad
tengo la convicción de escoger y volver a empezar.
Quédate donde estás destino, quédate, no vuelvas a tras
que tengo en mi vida a la mujer que me quiere de verdad...
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