Seguidores

miércoles, 4 de septiembre de 2013

MI SOL, MI VIDA: TÚ...





Se toca con las yemas de mis dedos
ese sol que luce vespertino
derramando su luz a mitad de camino
sin olvidar la plenitud de sus credos.

Sobre el horizonte llora esta tarde
con lagrimas de añoranza reciproca.
Besos sellados en el calor de su boca
donde su rayo clama y arde.

Lentamente va bajando entre los montes
hasta perderse tras las encinas.
Sol que muere sobre el verdor de las colinas
desafiando a la muerte que lo afronte.

Se ha olvidado de que mañana
nacerá de nuevo para todos
con la alegría de todos modos
que lo recibiré en mi ventana.

Solamente, sol, te pido, que al nacer
el nuevo día, tengas en tu agenda
un poema que te recuerda
que no te dejo de querer...

No hay comentarios:

Publicar un comentario