Si quiere llegar hasta mi corazón,
quiero que sepa que tiene dueña,
y más allá de lo que usted sueña
hay un camino para la razón.
Tiene libertad de volar por donde quiera
aplicando las leyes del universo,
y regresa cada noche a su lecho
donde una mujer le espera.
No comparte ni regala sus emociones,
ni demuestra su calor a cualquiera,
disfruta los colores de una nueva primavera
atado a un cielo de nuevas sensaciones.
Si se acerca a él procure no herirlo
buscando sus aristas para robarlo
porque no hay manera de conquistarlo
si no pone ternura para conseguirlo.
Así que no insista querida señora
que no tiene más sinceridad que su esencia
su olor es de dulce transparencia
y por donde pasa se le añora.
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