Gravitando entre dos olas
sin escuchar las leyes del universo,
para cubrirte de besos,
sueño con una tarde a solas.
No eres una conquista,
ni una cana al aire sin sentido,
cambiaste de mi vida hasta el sonido
y me enamoraste de manera altruista.
Mi corazón late a ritmo enamorado.
No hay marcha atrás, ya lo he dicho,
por que no se trata de un capricho
que se toma con los ojos cerrados.
Estás en mi vida por derecho,
nadie te sacará de ella.
Juntos miraremos la estrella
que nos alumbrará en nuestro lecho.
Mis puertas están abiertas
para que entres cuando quieras,
no hagas muy larga mi espera
por que te amo a ciencia cierta.
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